miércoles, 24 de junio de 2009

pedagogía marxista

Pedagogías marxistas.
El fundamento de la pedagogía socialista, de acuerdo con dicho fundamento (…) es preciso que el trabajo fabril constituya la base y el centro de la educación. De igual modo, este trabajo constituye la base de la escuela socialista.” Th. Dietrich, pedagogía socialista, sígueme, salamanca, 1976, p.16. En palacios 342.
Marx y Engels.
Contexto histórico.

Autores relevantes.

Nociones de enseñanza y aprendizaje.

Objetivos de la educación y ciudadanía.
Una muestra histórica concreta de cómo enfrenta la pedagogía marxista la relación entre educación y ciudadanía es el “Decreto de la comisaría del pueblo para la instrucción pública, redactado por Lunatcharsky y promulgado el 16 de octubre de 1918.
-Todas las escuelas soviéticas que dependen del comisariado reciben la designación de “escuela única del trabajo”
- todos los establecimientos de enseñanza existentes bajo diferentes autoridades, pasarán a depender del comisariado.
-la enseñanza es completamente gratuita desde los ocho a los diecisiete años, edades en que la asistencia a las escuelas es obligatoria.
-el número de alumnos al cargo de cada trabajador escolar no debe superar los veinticinco.
-El trabajo productivo colectivo y la organización de la actividad escolar en su totalidad, deben educar a los futuros ciudadanos soviéticos.
-Todos los exámenes, pruebas de ingreso o de promoción, están suprimidos.
-el consejo de escuela es el organismo responsable de la autogestión escolar. Se compone de: todos los trabajadores, representantes de la población activa del distrito escolar, alumnos de los grupos de edad más avanzados y un representante de la sección para la formación del pueblo.

Poder y transformación social.
El principio pedagógico marxista se propone como método el acabar con la división del trabajo que se fundamenta esencialmente en la separación entre el trabajo material y el mental. Así lo establecen los fundadores del marxismo en una de sus primeras obras:
“la división del trabajo sólo se convierte en verdadera división a partir del momento en que se separan el trabajo material y el mental” K. Marx y F. Engels, la ideología Alemana, en Obras escogidas, tomo I, p.30. En Jesús palacios, p. 340.
Así mediante la transformación de las estructuras básicas del sistema escolar se da origen a una visión más universal del ser humano, en cuanto a las labores que desarrolla en el medio social. Dicho de otro modo, “se pasará a suprimir la división del trabajo entre los hombres, a la educación, la enseñanza, universalmente desarrollados y universalmente preparados, hombres que sabrán hacer de todo”
V.I. Lenin, Izquierdismo, enfermedad infantil del comunismo, En V.I. Lenin, Obras escogidas, Progreso, Moscú. 1974, p. 561. En palacios 343.

Carácter adecuado.

Comparaciones.

Críticas de algunos autores.
Ya hemos dicho que uno de los autores más importantes dentro de la tradición de la pedagogía marxista es Makarenko. Ello porque es la práctica misma, a través de sus colonias, la que lo consagró en la historia de esta forma de hacer pedagogía.
Es esta misma práctica la que ha abierto un espacio de interpretación en torno a su figura. Citaremos a continuación dos perspectivas contrapuestas en torno a Makarenko y a su estilo pedagógico.
Ambas perspectivas pertenecen a historiadores de la pedagogía: el francés G. Snyders y el alemán Th. Dietrich. El primero ve a Makarenko como un modelo y sostiene que “la alegría es el motivo principal de la obra de Makarenko” (Pedagogie progressiste) , para el segundo, en cambio, considera que “todos los principios de instrucción escolar fueron tomados del régimen penitenciario y fueron transplantados al terreno de la pedagogía escolar general” (pedagogía socialista)
Reflexiones.
La pedagogía marxista es una herramienta muy valiosa para romper con el divorcio entre la teoría y la práctica, no sólo a nivel de la discusión académica , sino en el desarrollo educacional mismo.
La incorporación del trabajo dentro del proceso educativo, establece una filiación concreta entre el individuo en formación y el todo social. El primero aparece como un constructor y al mismo social y al mismo como una obra social.
Por otra parte, mediante el concepto de polivalencia incita al desarrollo integral de los seres humanos, respondiendo a la pregunta por la deshumanización y la fragmentación de la vida en la sociedad contemporánea.